
|
  
"Reciba de Dios la bendición,
de la NAturaleza y sus
elementos sus bondades y del ACAR, Municipio Rangel, su AMOR y RESPETO .
"
|

|
HISTORIA DEL ACAR:
EL ACAR nace por una
necesidad. En el año de 1999 las microcuencas de la comunidad de Misintá
se secaron y así viendo los
conflictos existentes por el agua, pues los agricultores necesitan más
del vital líquido para riego y consumo, ellos pidieron eligir como
Comisario de Ambiente en unas elecciones de la Asamblea del sistema de
riego de la comunidad de Misintá a la Sra. Ligia Parra, ella
decidió dirigirse a la montaña con un grupo de agricultores a indagar
por qué no bajaba agua por la microcuenca y llega a un sitio llamado
“Agüita de la Virgen”, ubicado en el Alto de Misaren a 3 mil 800 metros
de altura, donde observaron lo seca que estaba por el pisoteo del
ganado, por la falta de forestación y por el desamor de las personas,
que pareciera habían olvidado su obligación con el agua y el planeta
Tierra que nos da la vida.
Es allí donde comienza una intensa
labor de rescate y resguardo de al menos, 187 frágiles ecosistemas en 48
comunidades del páramo hasta ahora, esto se ha hecho mediante la
organización de jornadas de trabajo para encerrar con estantillos,
alambre de púas, forestación con plantas autóctonas de la zona a
las nacientes agonizantes y llevar a cabo los ritos espirituales, tal
como los hacían nuestros ancestros.
Trabajo espiritual con la Naturaleza. Una vez en el sitio donde se va a
trabajar, ella pide que se tomen todos de las manos para orar y conjugar
la energía de Dios, de la Madre Naturaleza y de las personas presentes y
para dar gracias por las bondades que ésta brinda.
A los siete meses de haber rescatado la “Agüita de la Virgen”, era
impresionante ver como fluía el agua y se escuchaba su canto;
aparecieron mariposas, libélulas y pájaros. De modo que, la gente se dio
cuenta de lo importante del trabajo físico,
espiritual con la naturaleza, de profesarle respeto, amor y cuidados.
También han rescatado otras nacientes como el “Ojo de la Laguna del
Humo”, cuya ofrenda fue llevarle un canasto con espigas de trigo,
flores, miel, inciensos, una velita blanca, cantos y oraciones.
Anteriormente nuestros ancestros lo hacían llevando un mapire (una
pequeña cesta) con una cuajada sin sal, un bojotito de chimó, un
botellita con aguardiente, espigas de trigo y un pedazo de papelón de
caña entre otras cosas.
Viendo la prosperidad de las
nacientes de la comunidad de Misintá, después de su rescate se unieron a
este trabajo las comunidades de Mocao, Misteque, Gavidia, Musuy,
Aposentos, Llano del Hato, Mitivivó, Apartaderos, El Royal,
otras comunidades aledañas y comenzaron con otros estados. Hasta el
momento se sigue el mismo trabajo y por los comités de riego se les hace
el mantenimiento y supervisión mensualmente.
Los Comités de riego, son
organizaciones de base de las comunidades, donde se agrupan todos los
agricultores para resolver problemas referentes al agua; son
organizaciones que se fundaron hace mas de 80 años. Antes de que
aparecieran los consejos comunales, eran los que resolvían todos los
problemas de la comunidad.
“No hay vida, donde no está
presente el amor”
Gandhi.

ligiaparracar@gmail.com
|